A medida que se desarrolla la revolución digital, más productos abandonan sus canales físicos y se comercializan en línea.

Por ejemplo, las películas y la música se venden digitalmente en lugar de CD, CD-ROM o DVD. Del mismo modo, los libros y juegos de video se comercializan con formato electrónico que se descargan o juegan en línea.

Si bien los derechos de aduana se aplicaron a las importaciones físicas de estos productos digitalizados, sus compras en línea escapan a tales impuestos, gracias a una moratoria de comercio electrónico de la Organización Mundial del Comercio (OMC), que prohíbe a los países aplicar derechos de aduana en las transmisiones electrónicas.

La medida se remonta a 1998 cuando algunos productos se comercializaron digitalmente y algunos países tenían la capacidad de recaudar derechos de aduana sobre las importaciones intangibles. Por otro lado, nadie había anticipado el inicio de una revolución digital.

Los países en desarrollo pierden ingresos 

La moratoria continúa desde 1998. Sin embargo, con el aumento de la digitalización de productos, los países en desarrollo, importadores netos de esas mercancías, están perdiendo rápidamente ingresos arancelarios debido a la decisión.

La UNCTAD estimó que la posible pérdida de ingresos arancelarios para los países en desarrollo debido a la moratoria fue de $ 10 mil millones en 2017.

En marzo, India y Sudáfrica describieron las implicaciones adversas de la moratoria para los países en desarrollo. Estos incluyen la pérdida de espacio político junto con los posibles ingresos arancelarios y el posible impacto de las tecnologías digitales como la impresión 3D en la fabricación.

La decisión, de continuar con la moratoria o no, se tomará en la 12ª Conferencia Ministerial de la OMC en 2021.

COVID-19 y efectos de la moratoria

COVID-19 y los bloqueos prolongados posteriores han llevado a un aumento exponencial en las importaciones de artículos de lujo digitalizados como películas, música, videojuegos y material impreso.

Si bien se espera que la crisis empuje a millones de personas en los países en desarrollo a la pobreza extrema, se están gastando preciosos recursos financieros internos en las importaciones de estos artículos de lujo.

Estimación de posible abolición de ingresos

La OMC identificó productos digitalizables en cinco categorías: grabaciones sonoras, obras audiovisuales, videojuegos, programas informáticos y obras literarias.

El Organismo identificó 30 productos digitalizables con sus códigos del Sistema Armonizado (SA) y los aranceles asociados, estimando que el comercio físico de estos productos ha estado cayendo a una tasa anual de -2.7% desde 2000.

La entidad concluyó que la caída de las importaciones físicas está asociada con la reducción de los ingresos arancelarios, por lo tanto, la pérdida estimada de ingresos arancelarios debido a la moratoria no es significativa.

Sin embargo, la UNCTAD destacó que la moratoria se aplica a las importaciones en línea, no a las físicas. Fue el primer estudio en estimar las compras en línea de productos digitalizables para 91 países.

El estudio encontró que las importaciones físicas globales reales de los 49 productos digitalizables identificados en 2017 valían $ 116 mil millones, mientras que las importaciones físicas estimadas se valoraron en $ 255 mil millones.

Por lo tanto, las importaciones mundiales de estos productos digitalizables a través de transmisiones electrónicas se estimaron en $ 139 mil millones.

Además, el estudio estimó que, debido a la moratoria de la OMC, la posible pérdida de ingresos arancelarios para los países en desarrollo fue de $ 10 mil millones en 2017.

La pérdida potencial de ingresos arancelarios para los países menos adelantados se estimó en $ 1.5 mil millones, mientras que los países del África subsahariana perdieron alrededor de $ 2.6 mil millones.

Los países de altos ingresos experimentaron una pérdida de ingresos arancelarios de solo $ 289 millones, ya que sus derechos consolidados promedio están fijados en 0.2%.

Por lo tanto, los países en desarrollo pueden generar cuarenta veces más ingresos arancelarios cada año en comparación con los países desarrollados al imponer derechos de aduana a las transmisiones electrónicas.

Posiciones sobre el alcance de la moratoria

Si bien la posible pérdida de ingresos arancelarios por la moratoria se ha estimado utilizando las importaciones y los derechos de aduana de productos digitalizables, parece no haber un consenso emergente sobre el alcance de la moratoria.

Un estudio realizado por el Centro Europeo para la Economía Política Internacional en 2019 estimó el impacto de la moratoria en los posibles ingresos arancelarios al incluir servicios en línea dentro del alcance de la moratoria.

La OCDE amplió aún más el alcance de la moratoria al destacar que las transmisiones electrónicas son «entregas digitales» e incluyen todos los servicios comerciales extranjeros que se comercializan electrónicamente.

Para abordar la cuestión del alcance cada vez mayor de la moratoria, el documento de investigación de la UNCTAD, titulado Moratoria sobre las transmisiones electrónicas: implicaciones fiscales y camino a seguir, proporciona pruebas contundentes, respaldadas por literatura económica y juicios legales, sobre la diferencia entre ‘intangibles’ y ‘servicios . ‘Sostiene que el comercio de intangibles debe tratarse como el comercio de bienes, que es diferente del comercio de servicios.

El documento estima que la cobertura comercial de la moratoria con un alcance extendido aumenta de $ 80 mil millones (importaciones de productos digitalizables) a $ 705 mil millones (incluidas las importaciones digitales de servicios, es decir, a través del Modo 1) para los países en desarrollo.

Esto muestra hasta qué punto se permitirán las importaciones no reguladas si se utiliza el alcance extendido de la moratoria.

Camino a seguir

La pandemia de COVID-19 ha revelado la importancia de preservar el espacio político en los acuerdos comerciales. En estos tiempos de crisis, es extremadamente importante que los países en desarrollo regulen sus importaciones de películas, música y videojuegos. La eliminación de la moratoria proporcionará este espacio político a los gobiernos.

Rashmi Banga, Oficial Superior de Asuntos Económicos de UNCTAD

Fuente: Aduana News